LA LUCHA CONTRA LA DIABETES, COMIENZA ANTES DEL DIAGNÓSTICO.
Las complicaciones de la diabetes pueden ser muchas y muy graves. Aunque las estadísticas sugieren que algunas complicaciones graves han disminuido. Y se supone que esto es consecuencia de las tecnologías modernas, que dan acceso a los pacientes a mayor conocimiento acerca de la enfermedad y estilo de vida recomendado. Las complicaciones de la diabetes están asociadas a las cifras altas de glucosa en sangre, son variadas y algunas pueden ser muy graves y que atentan contra la vida. Y es una enfermedad que no solo es de origen genético, sino que también puede aparecer como consecuencia de los malos hábitos de vida. Por lo anterior, lo mejor es sacarle la vuelta a la diabetes, siendo cuidadosos con la alimentación y con un estilo de vida saludable. Incluso aquellos pacientes con antecedentes familiares de diabetes pueden retrasar la enfermedad, si se afanan en una alimentación saludable y mantener una rutina regular de ejercicio físico. Y para el ejercicio físico, basta con caminar, a buen ritmo y por algunos cuarenta minutos, diariamente. Entre más tarde en la vida llegue el diagnóstico de diabetes, mejor pronóstico tendrá. Y, al contrario, entre más joven se le diagnostique diabetes a una persona, más probabilidades de complicaciones graves tendrá. Sin embargo, si ya tenemos un diagnóstico de diabetes mellitus tipo 2, ya sea que este diagnóstico haya llegado en la juventud o en la vejez, en ambas circunstancias conviene hacerle caso a su médico, apegarse a los tratamientos indicados, acoplar su alimentación a su dieta indicada, mantener su rutina de ejercicio y tratar de llegar a un peso corporal adecuado a su talla. La manera más rápida de llegar a las complicaciones es un paciente al que se le ha diagnosticado diabetes mellitus y hace caso omiso de su condición de salud y sigue con los excesos.
Complicaciones de la diabetes mellitus:
- Otras condiciones que acompañan frecuentemente a la diabetes mellitus son la hipertensión arterial y las dislipidemias, es decir grasas en sangre (colesterol y triglicéridos altos). Y todas estas otras enfermedades asociadas a la diabetes mellitus, predisponen a enfermedades cardiacas y a accidentes vasculares cerebrales (derrames cerebrales), las cuales son condiciones gravísimas, que ponen en riesgo la vida.
- Las cifras altas de glucosa en sangre sostenidas también afectan los vasos sanguíneos y nervios periféricos, los dañan. Ocasionando dolores de intensidad variada, falta de sensibilidad en algunas zonas y adormecimientos. Es lo que llamamos Neuropatía diabética. Esta es una de las complicaciones que vemos en los pacientes diabéticos con mayor frecuencia.
- El daño que ocasionan los niveles altos de glucosa en sangre a los vasos sanguinos y a los nervios, pueden llevar a ocasionar ceguera y amputaciones. No es nada raro que repentinamente un paciente diabético, amanezca con la novedad de que disminuyó dramáticamente su agudeza visual. E inclusive, hay quienes repentinamente perdieron la visión de un ojo, o de los dos. Las amputaciones de pies y piernas en pacientes diabéticos, tampoco es nada raro, desgraciadamente. E incluso, hay quienes llegan a perder ambas piernas a causa de una diabetes mal controlada.
- La insuficiencia renal, es otra complicación grave, que pone en riesgo la vida. Las cifras altas de glucosa en sangre deterioran la circulación sanguínea de los riñones, dañándolos y volviéndolos incapaces de cumplir con su función. De ahí que algunos de los pacientes diabéticos tengan que recibir diálisis.
Por lo anterior, hay que tomar conciencia de la enfermedad, recordar que no se cura, solo puede controlarse y no existen remedios mágicos, solo tratamientos médicos. Y, sobre todo, hay que recordar que la lucha contra la diabetes comienza antes del diagnóstico, con un estilo de vida saludable. Esto se refiere a dejar los excesos, comer con medida y que sean platillos balanceados, hacer ejercicio regularmente, procurar echarse a dormir desde antes de la medianoche, levantarse temprano, beber suficiente agua, controlar los niveles de estrés, etc.
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