Relajarse antes de dormir es una forma de mejorar la calidad y la cantidad del sueño. Cuando estamos relajados, podemos conciliar el sueño más fácilmente, dormir más profundamente y despertarnos más descansados. Además, relajarse nos ayuda a reducir el estrés, la ansiedad y las tensiones que pueden afectar a nuestro bienestar físico y mental.
la cantidad de agua que debes beber al día depende de ti y de las circunstancias que te rodean. Lo importante es que escuches a tu cuerpo y bebas agua cuando tengas sed o cuando lo necesites. Así podrás mantener tu cuerpo hidratado y saludable y evitar los calambres! 😊
El vino tinto es conocido por su sabor y aroma, pero ¿sabía usted que también puede ser beneficioso para su salud del corazón? En este artículo, exploraremos la conexión entre…
Las varices son venas dilatadas y retorcidas que aparecen principalmente en las piernas. Aunque son comunes, pueden ser incómodas y dolorosas. En esta guía, compartiré algunas formas en que puedes…
Los lunares, también conocidos como nevos, son crecimientos de células pigmentadas en la piel. Estos pueden variar en tamaño, forma y color. Algunos lunares pueden ser planos y suaves, mientras…
¿Qué hacer si te da diarrea?
Es común que en verano, aumenten los enfermos de diarrea.
Es necesario tomar conciencia de la enfermedad, recordar que no se cura, solo puede controlarse y no existen remedios mágicos, solo tratamientos médicos.
Sobre todo, hay que recordar que la lucha contra la diabetes comienza antes del diagnóstico, con un estilo de vida saludable. Esto se refiere a dejar los excesos, comer con medida y que sean platillos balanceados, hacer ejercicio regularmente, procurar echarse a dormir desde antes de la medianoche, levantarse temprano, beber suficiente agua, controlar los niveles de estrés, etc.
En el verano, hay muchos factores que nos predisponen. El calor, que incrementa la temperatura corporal, la sudoración y la poca ingesta de agua, aunados al estrés que causa en sí mismo el calor, además de las asoleadas y las desveladas, los cambios abruptos de temperatura y los ambientes altamente húmedos. Todo esto provoca que se debilite nuestro sistema inmune. Y entonces muy fácilmente caemos en las garras de una infección respiratoria.
En el verano, hay muchos factores que nos predisponen. El calor, que incrementa la temperatura corporal, la sudoración y la poca ingesta de agua, aunados al estrés que causa en sí mismo el calor, además de las asoleadas y las desveladas, los cambios abruptos de temperatura y los ambientes altamente húmedos. Todo esto provoca que se debilite nuestro sistema inmune. Y entonces muy fácilmente caemos en las garras de una infección respiratoria.
Es bastante común que en el hogar ocurran pequeños accidentes, en los que como resultado tengamos una herida pequeña y superficial, un raspón o rasguño. Por lo anterior, es necesario…